EL HAMBRE COMO ARMA DE LOS PODEROSOS

Un superficial análisis del sistema capitalista, nos permitirá lagar a una fácil y acertada conclusión es que en un campo en manos privadas , los que deberían producir alimentos, en realidad funcionan como generadores de hambre, pues es sabido que la ecomonia burguesa es la ciencia de la escasez, de lo que se deduce que la abundancia es antieconomica, entonces es anti burguesa. Dentro de su esquema mental burgués, es correcto causar carencia, no importa si se trata de crear un escasez programada en los teléfonos celulares de ultima generación que comprarán los ricos o en los alimentos de los más pobres.

Y estos señores están consientes de que pueden usar la economía como un arma, en las ultimas semanas no han dudado en intentar ataques sistematicos de hambre, para acabar con algunas situaciones que consideran perturbadoras contra sus intereses. Las expresiones locales del imperialismo han anunciado una nueva arremetida.

Primero Venezuela, luego Argentina y ahora se asoma una crisis similar en Bolivia, los dueños del Campo pretender usar los estómagos del pueblo como armas a favor de sus mezquinos intereses. Carne en Buenos Aires, Leche en Venezuela, aceite comestible en Bolivia, son las más recientes expresiones del fascismo continental, no tiene nade de nuevas: El paro general en Chile antes de derrocar a Allende, el bloque a Iraq , las restricciones a Iran y los 40 años e bloqueo a Cuba han sido diseñados por las mismas mentes y planeando la misma metodología. Mientras los gobiernos progresistas del continente persiguen alcanzar el reto de garantizar la alimentación a sus pueblos, las burguesías locales buscan, en unos casos, hacer fiesta con el vertiginoso incremento de los precios de los alimentos a nivel mundial, en otros casos no tiene escrúpulos en asumir que es para tumbar al gobierno.

El fin de 2007 y comienzo de 2008 en Venezuela, estaría caracterizado por una escasez de leche, luego se irían sumando a la “lista” productos como el arroz, el aceite, la carne, el pollo, entre otros. Este fenómeno estaría complementado por una fuerte campaña mediatica que se configuro para que se registrara un aumento de la inflación en cuestión de semanas, y como siempre seria “culpa del gobierno”. Algunos medios ya anunciaban con supremo regocijo la “hambruna que se avecinaba” , lo decían con la certeza de quien estaba planificando la trajedia, total el “equilibrio del mercado” les hará recuperar sus ganancias luego de que el gobierno encabezaba por ellos mismos, les permita una liberación de precios, en un gesto de suprema democracia de elites.

Sin embargo, el Gobierno supo reconocer tarde el saboteo por hambre y no fue sino hasta la derrota electoral del 2 de diciembre que se pudo tener un acercamiento a la verdadera dimensión de los efectos de estas acciones.

Los esfuerzos emprendido, aunque con algún retraso en el arranque han visto sus frutos, la leche y el arroz se consiguen, con los precios regulados y ya ninguno de estos torturadores habla de la hambruna, poco a poco se fue descubriendo que los alimentos eran escondidos y los mismos acaparadores entraron en razón al ver que la gente no consideraba “necesarios” a los especuladores, lo indispensable son los alimentos, que pueden conseguirse en los repotenciados mercal y los nuevos PDVAL.

Esta semana han sonado cacerolas en Buenos Aires, cacerolas de la misma calidad y que han cocinado alimentos de similar tipo a las que sonaban en Caracas en las fechas cercanas al golpe de Estado, reclamando que suban los alimentos. Cristina Fernandez enfrenta de esta manera a los latifundista, que exigen que el gobierno fije “precios mínimos” para la carne y que una subida de las cuotas de exportación, además reclaman su derecho a sembrar todo el campo de soya que solo sirve para exportar ya que se ha comprobado lo nocivo que resulta su consumo en seres humanos.

Al teclear en un buscador de Internet la palabra “desabastecimiento” los primeros resultados apuntan a paginas argentinas, (hace unas semanas era a Venezuela) reclamando que la carne, practicamente un símbolo nacional argentino, estaba escaseando en los mercados , además los corte de ruta impedían la llegada de los alimentos al campo. La estrategia no parece muy distinta a la de los venezolanos.

Ahora los productores bolivianos de aceite exigen que se les permita exportar, aun en detrimento de el consumo de los bolivianos, y no solo eso: desde santa cruz exigen desconocer el gobierno y que el prefecto dicte las normas de exportación, para esta autoproclamada “región autónoma”.

América Latina se encuentra bajo ataque, la famosa frase de Napoleón de que “los ejercitos marchan sobre sus estómagos” esta siendo nuevamente aplicada por los enemigos de los pueblos utilizando el hambre como un arma, para obligar al pueblo a luchar.. contra si mismo.

29 de marzo de 2008